En 1792 comienza la construcción
del canal sur, con proyecto realizado por el ingeniero Juan
de Homar, sustituto de Fernando de Ulloa tras su jubilación
en 1786.
Comienzan las obras en Serrón(Grijota).
Se detienen en el sitio de Soto Albúrez (lugar localizado
entre Villamuriel de Cerrato y Dueñas), abriéndose
un largo periodo de inactividad.
Desde 1804 hasta 1828 no se hacen
obras nuevas en el canal. La guerra de la Independencia
interrumpe totalmente la actividad del canal; la navegación
se suspende, las nuevas poblaciones se abandonan y los molinos,
almacenes y fábricas padecen continuos saqueos.
En 1828 Fernando VII, comprende
la importancia del Canal del Castilla, pero la Hacienda
Pública no puede hacer frente a los gastos, resuelve
crear la Real Junta de Canales de Castilla para que estudie
y gestione la transferencias del canal a la iniciativa privada.
El 17 de marzo de 1831 se publica
una Real Cédula por la que se concede a la empresa
representada por Alejandro Aguado, la gestión del
canal de Castilla, obligándole a que termine las
obras y a desecar la laguna de la Nava.
La compañía se comprometió
que en un plazo de siete años llevaría a cabo
tres tramos:
- En el canal sur el tramo que va de Soto
Albúrez a Valladolid.
- En el ramal de Campo el que va de Sahagún el Real
a Medina de Rioseco.
- En el ramal norte, el tramo comprendido entre alar del
Rey y Blomir (población cercana a Reinosa).
Las concesiones a la compañía eran:
-
Explotación exclusiva de todos
los recursos del Canal durante 80 años a partir de
la terminación de las obras.
-
La disposición de 2.500 prisioneros para la terminación
de los trabajos así como los ingenieros necesarios.
-
La percepción de 300.000 reales al año
y la percepción con carácter perpetuo de las
tierras de la Laguna de Nava que se pudiesen cultivar después
de su desecación.
En 1831 comenzaron las obras en Soto Albúrez
bajo la dirección del ingeniero Epifanio Esteban,
terminandose el canal sur en 1835.
Se comenzó, a continuación,
en el Ramal de Campos las obras desde Paredes de Nava hasta
Fuentes de Nava. Pero la guerra Carlista obligó a
paralizar las obras en 1836.
Hasta 1841 surgen problemas al
incumplir el estado sus obligaciones y por otra parte la
compañía, al no terminar las obras. En esta
fecha las Cortes aprueban una Ley por la que se autoriza
al gobierno a negociar una transacción con la empresa
del canal, para lo que se forma una comisión, que
llega a la conclusión de que el tramo entre Alar
del Rey y Blomir no era viable, ni rentable.
En 1842 se reanudan los trabajos
en el Ramal de Campos, comenzando en Fuentes de Nava.
El 8-11-1849 se termina en Medina
de Rioseco. El 14-12-1849 el canal se abre a la navegación
en su totalidad.
En 1850 se constituye la Sociedad
Anónima del canal, que inicia la explotación
de todos sus recursos hasta 1919 que revierte al Estado.
En 1955 se suspende la navegación
y se orienta la explotación hacia el regadio. |